domingo, 31 de mayo de 2015

LA PELOTA SI SE MANCHA La AFIP no descarta investigar el patrimonio de los Grondona

El titular del organismo tributario aclaró que en el caso del expresidente de la AFA "hay penas privativas de libertad que no se podrán aplicar, pero el entramado económico, en la medida que tengamos elementos, todo es sujeto de investigación, sea quien sea".
Echegaray, en diálogo con AM 1110, agregó: "Necesitamos saber si hay dinero que ha ingresado a una persona física o a una asociación comercial y no está declarado, y si ese dinero es sujeto de pago de impuestos. Vamos a reclamar lo que nos corresponde".
El funcionario exhortó a los Estados Unidos para conocer "toda la documentación que permita cuantificar cuánto es el fraude con el que se perjudica a Argentina". "Nuestra administración tributaria demanda la repatriación de lo que hasta ahora sabemos, 3.500 millones de dólares que deberían volver a la Argentina".
"Había clubes de Uruguay, Chile, del mismo Suiza, que participaban como paraísos fiscales deportivos. Eran clubes que se hacían de los pases de jugadores, pero nunca el jugador pisaba el club ni su estadio. Esos clubes terminaban siendo los sueños del pase mediante una sociedad", explicó.
En cuanto a los argentinos denunciados por Estados Unidos, que se mantenían prófugos, Echegaray reiteró: "Lo que más interesa es que estos empresarios le paguen al pueblo argentino a través del Estado lo que deben".

sábado, 30 de mayo de 2015

UN EX GOBERNADOR DE MISIONES DIJO QUE SU CANDIDATO TIENE “EL VOTO BOMBACHA” El machismo hace campaña

“Tiene pinta y el voto bombacha está asegurado”, dijo el radical Ricardo Barrios Arrechea sobre Gustavo González. Luego pidió disculpas por la “desafortunada expresión” y se justificó al decir que buscaba “destacar a nuestro joven candidato”




El ex gobernador radical de Misiones Ricardo Barrios Arrechea encontró una curiosa manera de impulsar a su candidato a la gobernación y una forma desagradable de referirse a sus votantes mujeres. Al destacar la figura del candidato de su partido, Gustavo González, dijo que “tiene toda la posición para triunfar; tiene pinta y el voto bombacha está asegurado”. Ante las críticas y repudios recibidos tuvo que salir a pedir disculpas.
El ex gobernador dijo en su cuenta de Facebook que lamentaba su “desafortunada expresión”, pero se quejó de que el tema fuera tratado en una sesión de la Legislatura local. “Es tragicómico que merezca una sesión en Diputados como tema relevante, desnudando el oportunismo y pobre nivel del oficialismo”, aseguró.
La diputada disidente de la UCR María Losada presentó un proyecto de repudio. Al fundamentar su postura, expresó que “es lamentable que un hombre de la política tenga esas expresiones hacia las mujeres”, y advirtió que los dichos derivan de una lógica “que inhabilita a la mujer. Configura un acto de extrema violencia”.
El diputado radical Germán Bordón, como presidente de su bloque, cuestionó el proyecto de repudio por cuanto “tal vez en el entusiasmo por describir las bondades de un candidato y su aspecto físico”, Barrios Arrechea dijo “la infortunada frase” que desató la polémica.
Otros legisladores provinciales participaron en el debate, hasta que el proyecto de repudio fue aprobado con el voto de la mayoría, excepto de los cuatro representantes de la UCR, que se ocuparon de dar a conocer el pedido de disculpas del ex gobernador que fue criticado.
En su descargo, Barrios Arrechea pidió disculpas y dijo que su intención fue destacar a “nuestro joven candidato” y criticó a la Legislatura que, afirmó, “más vale debiera debatir sobre la desbocada corrupción en Misiones, que daña mucho más a la moral y a la sociedad que mi desafortunada expresión”.

› PANORAMA POLITICO Centro Kirchner

 Por Luis Bruschtein
Las listas de Jorge Capitanich arrasaron en las PASO chaqueñas y tiñeron las fiestas mayas chaqueñas. Entre el viernes y el lunes millones de personas circularon por Avenida de Mayo en Buenos Aires, miles asistieron al traslado del sable de San Martín y en esos días se inauguraron el Sitio de Memoria sobre la represión más trascendente de esos años y un centro cultural que por su ambiciosa propuesta se proyecta de aquí en adelante como eje de las expresiones y actividades de la cultura de todo el país. El 25, cientos de miles se agolparon en la Plaza para escuchar a la Presidenta y recordar tanto la fiesta patria como la asunción de Néstor Kirchner en el 2003. La política atravesó los festejos y enojó a una oposición que poco a poco se va nucleando alrededor de Mauricio Macri, un empresario de centroderecha que lo primero que hizo cuando asumió como mandatario porteño fue embanderar el Gobierno de la Ciudad con el color amarillo de su partido.
La historia siempre tiene una mirada política porque sus protagonistas, su desarrollo, sus investigadores y sus intérpretes la tienen o la han tenido. Y los políticos tienen una raíz histórica más allá de su voluntad. No salen de un repollo sino que expresan continuidades y rupturas de condicionantes anteriores a ellos, que constituyen sus matrices. Aunque no las asuman, consciente o públicamente, las van a estar expresando.
La historia y la política no son lo mismo pero están irremediablemente entrelazadas. Como en todos los órdenes relacionados con la política, cuando se habla de despolitizarlos, lo que se está diciendo en realidad es que hay que respetar la política que se impuso sobre las demás. Es la exigencia que se formula desde un lugar de poder para que se respete a aquella mirada política de la historia que, como es hegemónica, puja para que se la asuma como natural, originada en alguna esencia del universo que en realidad es nada más que el sentido común impuesto por esa hegemonía desde ese poder.
Aun así hay una identidad histórica que no se alimenta de una sola vertiente (por la hegemónica o por la opuesta), sino que de alguna manera se constituye por todas, como la personalidad de un individuo que tiene ángulos tan diferentes y contradictorios. Se puede discernir entre unos y otros, pero no se puede excluirlos si lo que se busca es reconocer una identidad que se cristaliza en un momento del pasado que se proyecta hacia el presente.
Por eso, y a pesar de eso, separar en forma tajante la historia de la política es imposible. No fue casualidad que la protesta más airada por la supuesta apropiación de las fiestas de mayo por el kirchnerismo proviniera del diario La Nación fundado por Bartolomé Mitre.
Como cuando propugna la “objetividad periodística”, cuando reclama por la apropiación de la historia, el diario La Nación abjura de su origen, de los motivos para los que fue fundado por ese hábil político conservador. Es casi una broma de la historia que La Nación sea portavoz de ese reclamo porque si hubo alguien que quiso apropiarse de la historia y lo hizo fue Bartolomé Mitre. Con mucha sagacidad y con un entendimiento profundo de los decursos recónditos del poder, Mitre emprendió la monumental tarea de escribir la primera versión más o menos científica de la historia argentina y fundó un medio de comunicación como La Nación. La historia mitrista, con sus buenos y sus malos ideológicamente concebidos, logró instalarse como historia oficial y todavía hoy muchos la asumen así. El impulso de fundación de La Nación fue tan poderoso que se proyectó hasta el presente, cuando se mantiene como la voz principal del conservadurismo. Mitre, que fundó además un linaje aristocrático al modus argentino (su familia era de origen griego de apellido Mitropoulos), era un intelectual y un político de raza con gran sentido del poder, lo que le permitió influir en toda la segunda mitad del siglo XIX atravesando confrontaciones, guerras y luchas intestinas. Su historia argentina y su diario fueron concebidos como armas de la disputa de un hombre siempre a la ofensiva, dispuesto a todo para instalar su ideario conservador porteño.
Los nombres de las calles, los de las plazas y sus estatuas, en Argentina, sobre todo en Buenos Aires, tienen las mismas elecciones y prioridades que la historia de Mitre, aunque poco a poco ha comenzado a flexibilizarse. Por eso, en un momento de su discurso, el 25 de Mayo, en la Plaza de Mayo, la Presidenta advirtió a los que criticaban la designación del nuevo centro cultural en el viejo Correo con el nombre de Néstor Kirchner. “Si es por criticar nombres, nosotros podríamos revisar los nombres de muchas calles”, advirtió.
El discutido nombre va más allá de una reivindicación personal. El nuevo centro cultural está concebido para dar testimonio de una época del país y ha sido diseñado con ese propósito. Y Néstor Kirchner es el nombre que mejor da cuenta de esta época. Si no hubiera sido por el ex presidente pingüino, el viejo Correo sería un monumento a la hamburguesa o un shopping al estilo de las bellísimas Galerías Pacífico o del hermoso edificio del Abasto, dos joyas arquitectónicas que fueron abandonadas y privatizadas por la cultura del neoliberalismo.
En vez de hamburguesas y shopping, la nueva época propone un gran centro cultural federal, un polo de cultura de la Nación, un gran centro público que no tiene por qué ser menos que los privados donde sólo pueden acceder los que tienen plata para pagar la entrada. Hay una concepción detrás de esta obra imponente tan criticada por los que privatizaron Galerías Pacífico y el Abasto y quisieran privatizar el Colón. Dirán que es un concepto “peronista” o “populista” o “estatista” priorizar la cultura sobre el shopping y la hamburguesa y que además no se piense a la cultura popular como una limosna, como una excreción de la gran cultura de las elites y, en cambio, se admita al pueblo en un ámbito que envidian los privatizadores. Son visiones diferentes. El nuevo centro cultural representa una de ellas, de la que a su vez el fallecido ex presidente Néstor Kirchner es su expresión más cabal. No se trata de una glorificación faraónica sino de la proyección de una época, por lo que bautizarlo con su nombre tiene sentido.
La oposición hace una construcción de negación total del oficialismo. Es un esquema que no puede consentir nada bien hecho por su adversario. Es la estrategia de negar todo, cerrarse a todo, plantear cada acción del oficialismo como un examen final. Pero es una estrategia peligrosa, porque el kirchnerismo es hiperquinético y genera situaciones todo el tiempo como una metralla que golpea sobre ese muro de negación que en un punto se resquebraja. Sobre esa base, las alianzas del macrismo y los radicales y un crecimiento razonable en las encuestas, los medios opositores habían creado laboriosamente un clima propicio y triunfalista para la candidatura de Mauricio Macri. Pero una estrategia tan rígida de negación se derrumba como un castillo de naipes cuando se genera una expectativa por el fracaso de los festejos de la Semana de Mayo y ese esperado fracaso se convierte otra vez en una convocatoria de millones de personas. Arrastrada por esa estrategia de los medios opositores, la oposición pasa del triunfalismo a la depresión. La Semana de Mayo fue de apogeo para el kirchnerismo, que también aportó otros contenidos a su propuesta democrática.
Lo hizo con la exaltación de los derechos humanos en la inauguración del museo de la ex ESMA y del general San Martín con el traslado de su espada, el sable que nunca se desenvainó contra sus compatriotas. También allí hubo una intención política clara: esta democracia toma el San Martín que combatió por la libertad y nunca contra sus paisanos, y los derechos humanos que violaron las dictaduras. Fueron los dos símbolos que se promovieron esa semana más allá de las protestas de algún sector de la oposición y la hipocresía de La Nación. Por encima de ese debate menor, e incluso de la apuesta más tacticista electoral del Gobierno, hubo un aporte que trasciende todo eso: una democracia sin golpes militares y respetuosa de los derechos humanos.

› AVANCE EN LA INVESTIGACION SOBRE LA RESPONSABILIDAD DE LOMA NEGRA EN DELITOS DE LESA HUMANIDAD Los desaparecidos de la cementera

Por Alejandra Dandan
“Nos llevaron de Loma Negra directo a la cárcel de Azul”, declaró Eustorgio Rodolfo Arenzo ante la Justicia de Instrucción. También llevaron a esa cárcel a otros tres compañeros de la cementera de los Fortabat. “Nos encontramos en la puerta. Entramos a una sala grande, estaban todos con armas largas, eran penitenciarios. No había ningún militar. Había una oficina y nos ponen a los seis contra la pared con las manos levantadas para revisarnos. En ese momento sale el jefe de la cárcel, lo agarra a Peralta y le dice: ¿vos sos Pichirica? Y lo lleva para adentro y le pregunta qué había pasado. Peralta le cuenta que no podían enchufar una bolsa, que habían pedido hablar con el jefe de personal para arreglar el problema y se negó al pedido y nos denunció al Ejército. Entonces el jefe de la cárcel le dice: “Vos sabés que tenemos orden de matarlos, directamente Loma Negra dio orden de matarlos”.
Este es uno de los nuevos testimonios que se agregaron en la causa sobre la responsabilidad de la empresa Loma Negra en violaciones a los derechos humanos durante la última dictadura. Al concluir el juicio oral por el secuestro y asesinato del abogado laboralista Carlos Moreno, el Tribunal Oral ordenó una investigación más amplia sobre la empresa. El expediente sumó nuevas víctimas. Además de Moreno, el fiscal Walter Romero de Azul investiga el secuestro de seis trabajadores detenidos el 20 de julio de 1976. Romero pidió al juez federal de Azul Martín Bava indagatorias de 18 personas por estos casos. Entre ellos, a los jefes militares de la zona, como el entonces teniente Ignacio Aníbal Verdura, jefe de la guarnición militar de Olavarría, pero también sobre personal civil de Inteligencia infiltrado en la empresa. En tanto, el fiscal dejó dicho en el escrito que también deberían ser convocadas las personas más emblemáticas de la cementera, como Amalia Lacroze de Fortabat, Ernesto Cladera y Bernardo Miretzky, responsables del área de personal y ejecutivos que fallecieron y “por lo tanto la responsabilidad penal a su respecto se encuentra extinguida”.
Para la fiscalía, el cúmulo de documentos permite sostener como hipótesis la responsabilidad de Loma Negra en estos hechos. “Sin hesitación alguna –sostiene– (se puede decir que) los responsables de la empresa solicitaron a sus socios en el poder tanto la eliminación física de Carlos Alberto Moreno como también la detención de los obreros y del abogado Mario Gubitosi, quien salvó su vida al exiliarse durante largos años en el exterior.” En su teoría señala que “la empresa Loma Negra tenía un especial interés en la reducción de los conflictos gremiales debido a los costos que debía afrontar para el pago de los reclamos laborales, como también el resto de las constancias permiten afirmar que la empresa constituía uno de los soportes empresariales que contribuyeron al mantenimiento de la dictadura”.
Esa conclusión que aún debe evaluar el juez federal Bava es uno de los aportes más singulares a la causa. Es la línea de argumentos que impulsan las querellas, entre otras los hijos de Moreno y su viuda. Una línea que se intuye en cada una de las causas que trabajan la dimensión económica de la dictadura. Pero el mérito aquí es haber llegado al pedido de indagatorias con los papeles bajo el brazo.

Los documentos

Uno de esos papeles es el informe varias veces mencionado en este diario de la Oficina de Investigación Económica y Análisis Financiero de la Procuración. “A pedido del Ministerio Público, la Ofinec realizó un relevamiento de los 118 libros contables de la empresa Loma Negra que se encuentran en esta fiscalía correspondientes al período 1975-1983.” El escrito hizo hincapié en la evolución de los ejercicios contables y la rentabilidad y costo laboral.
El estudio demuestra que entre el 1º de abril de 1975 y el 31 de marzo de 1976 se registró el nivel más alto de participación de los trabajadores en los ingresos de la empresa, llegando al 19 por ciento. A partir del ejercicio siguiente esa participación cayó abruptamente, hasta alcanar el 9 el 31 de marzo de 1983. “Esta abrupta caída de los ingresos de los trabajadores, que se ve reflejada en los estados contables al analizar el costo laboral en comparación con los ingresos facturados, es la que permite un incremento de la ganancia empresaria”. Durante ese período, “la facturación de la empresa aumenta en forma sostenida”, pero no es acompañado por un incremento de costos general ni laboral. Sobre la cuenta que preveía las indemnizaciones agrega que “se observa la abrupta caída en el importe reservado a partir del año 1976”, del orden de un 72 por ciento, y vuelve a caer durante los dos períodos siguientes “es decir, aquel en el que ocurrió el asesinato del abogado laboralista que llevaba a cabo los juicios contra la empresa Loma Negra SA”.
La causa sumó otros documentos. Entre ellos, y a modo de muestra, dos expedientes laborales judicializados que se pudieron rescatar. En ellos puede verse qué fue pasando con ellos. Y el pase de abogados mientras caían los que los iniciaron, atemorizados, secuestrados o asesinados. Otra de las novedades es la voz en primera persona en la causa de los ex secuestrados que se acercaron finalmente a la instrucción.

Los testimonios

Leonardo Roberto Crespo trabajaba en Loma Negra y era parte de la Asociación Obrera Minera argentina (AOMA). “Don Alfredo –declaró– siempre tuvo buena relación con los militares del regimiento que concurrían a los actos y las fiestas de Loma Negra.” Antes del 24 de marzo, el gremio y los delegados tenían buen diálogo con la empresa. Crespo no se acuerda, de hecho, de medidas de fuerza. “El 24 de marzo se enrareció el clima porque prácticamente en lo gremial no nos atendían, por ahí sí en la parte social (... pero después) directamente no nos atendía porque la línea bajaba de los militares.”
Bajo ese clima “enrarecido”, la empresa hizo avances que significaron “un notable retroceso en las condiciones de trabajo y reportaron a Loma Negra enormes ganancias”, señala la fiscalía. En 1977, cambió “unilateralmente el Convenio Colectivo” de trabajo “que teníamos en cuanto a la parte salarial”, dijo Crespo. “Cambió la categoría, a algunos les rebajó y a otros aumentó. Nos sacó conquistas económicas, como adicionales dentro de las ocho horas. O teníamos dos horas de premio por realizar algún agregado de trabajo.”
Otro testimonio clave fue el de Roberto Omar Gil, miembro de la comisión directiva de AOMA y trabajador de Loma Negra. Gil habla del trabajo de visibilización de la silicosis como uno de los “principales reclamos gremiales que enfrentó Loma Negra a partir de 1974”.
Los trabajadores contrataron a Gubitosi. El los puso en contacto con un médico, hijo de un capataz general de la fábrica, que conocía todos los secretos. El médico era Carlos Alberto Bhürle. “Ahí nos enteramos de que muchos fallecían de tuberculosis, una enfermedad pulmonar, igual a la silicosis. Entonces empezamos a desconfiar y a pensar que en realidad no era tuberculosis sino silicosis. Yo creo que ponían tuberculosis pero en realidad era silicosis.”
“Yo tenía un miedo terrible –dijo Crespo–, soy peronista de cuna y tuve que sacar todos los libros de mi casa e incluso quemar alguno. Dependíamos de que la fábrica un día diga: sacame a este que me molesta, y listo. Todas las maniobras militares se hacían en el campo de Fortabat, en la pampita creo que le llamaban, tenían una relación estrechísima. El Ejército, para agradecerle el préstamo de esos lugares, un día le llevó un cañón con rueda de obsequio a la estancia que está cerca de la fábrica de calera Avellaneda.”
El 10 de junio de 1976 se inició la causa conocida como “Florencio Paniagua por indemnización por incapacidad física”. Gubitosi señaló en la demanda que Paniagua padecía una enfermedad llamada silicosis, producto de las precarias condiciones en que desarrollaba su actividad en el área rompedora de piedras. A Gubitosi lo secuestraron de diciembre de 1976 a marzo de 1977. Probadas las causas, el Tribunal condenó a Loma Negra el 21 de marzo de 1977. Para entonces, ya estaba encaminada otra causa, llamada Zabala, con Moreno en el expediente y nuevamente con eje en la silicosis. Moreno se quedó con la representación de esa causa pero lo secuestraron en abril de 1977. Los trabajadores no consiguieron otro abogado. Preguntaron a Gino Pizzorno, que no aceptó cuando supo que a Moreno lo habían matado, según lo que él mismo declaró en este expediente. Esa reconstrucción también es interesante. La causa siguió con un defensor oficial. El 4 de julio de 1977, la empresa firmó una conciliación muy favorable a sus intereses. “Resulta llamativo –dice el fiscal– que el acuerdo fue sólo por la mitad del monto solicitado y teniendo como antecedente la sentencia que el tribunal había dictado en el caso Paniagua cuatro meses antes”. En julio o agosto de 1977, Loma Negra desvinculó a Gil de la empresa. Romero presentó al juzgado de Bava todo esto a comienzos de mes. El juez no se pronunció pero ordenó una pericia de la Corte sobre el informe de la Ufico, hecho que la fiscalía ve como un avance.

CONTRATAPA Ada y Manuela

 Por Sandra Russo
Ana Colau y Manuela Carmena.
A fines del año pasado algunos allegados empezaron a insistirle a la ex jueza Manuela Carmena para que aceptara la candidatura a alcaldesa de Madrid en representación de un frente de agrupaciones políticas y civiles, entre ellas el partido Podemos, compuesto en su mayoría por jóvenes académicos y activistas surgidos del 15M. Ella no quería y varias veces dijo que no. Decía que no porque estaba muy a gusto con su tienda de Yayos Emprendedores, que comercializa ropa infantil hecha por mujeres detenidas o recién liberadas, después de haber formado parte de la Corte Suprema y de una larga carrera judicial que comenzó en la dictadura franquista, defendiendo a presos políticos. “Siempre había rechazado ofertas por el estilo, que las hubo, y me parecía que tenía que ser alguien joven. Lo sigo creyendo. Pero eran jóvenes los que me insistían. Tanto lo hicieron que se volvió contradictoria mi negativa, porque yo decía que eran los jóvenes los que tenían que tomar la iniciativa y la iniciativa que tomaban ellos era pedirme que los secundara. Entonces, como que me han pillado”, explicaba Carmena en abril.
Hoy, después de las elecciones de hace una semana, su frente negocia con el PSOE su arribo al gobierno del ayuntamiento de Madrid. Es difícil que el PSOE pueda negarse después de la aplastante caída del PP, su socio de tropelías neoliberales. Desde el interior del socialismo español hay muchas voces que reclaman virar de asociación y ajustarse a los tiempos que corren no sólo en España, sino también en toda Europa. Por su parte, a Carmena “la pillaron” esos jóvenes no por pura insistencia, sino por la sintonía de sucesos que ocurrían mientras ella pensaba que sí y que no. “Aunque te pueda parecer ridículo –le dijo en abril a un periodista de Eldiario.es–, cuando me enteré del naufragio de los mil emigrantes en el Mediterráneo... te quedas con esa sensación terrible de no hacer nada. ¿Cómo es posible que se mueran mil personas en un barco porque hay partes en el mundo en las que es imposible vivir? ¿Cómo eso nos va a dejar indiferentes? Está intentando nacer una nueva manera de producir, que no es el capitalismo, que no es la planificación clásica socialista que conocemos, que intenta de alguna manera cuestionar todo eso. Y eso implica un cambio en la política.” Ya en campaña, su entusiasmo por lo que implicaba su candidatura había despertado, pero no por la seducción en sí del ofrecimiento, sino por cómo esta ex jueza de 71 años se lo toma. “Ahora sé que hago algo, que no me gusta, que no me apetece especialmente, pero pienso que puede ser útil.” ¿Util para qué? Carmena lo ha dicho ya muchas veces, y desde aquí la frase suena conocida: “Para ser un puente entre generaciones”.
En Barcelona, en tanto, no hace falta esperar nada porque los resultados han sido rotundos y la nueva alcaldesa es Ana Colau, de 41 años, una activista social también respaldada por Podemos. Aunque su visibilidad ha sido mucha desde la crisis de las hipotecas, cuando se revisa la trayectoria de luchas de Colau se recoloca a su propia generación junto con jóvenes de todo el mundo que hacia al año 2000 despertaron a la conciencia de que había que hacer algo frente a las distorsiones del capitalismo que traía consigo la globalización. Colau pertenece a la clase media que aplastaron los ajustes neoliberales. Antes de su propio desahucio, que la metió hasta las orejas en su activismo, Colau estudió Filosofía, atraída por el existencialismo francés. Pero lo que le cambió drásticamente su manera de leer lo que pasaba en el mundo no fue un libro de texto, sino una revuelta enorme, la de Seattle de 1999, cuando allí se reunía la Organización Mundial de Comercio (OMC). Si se buscan en el archivo esas jornadas de represión feroz, se recupera un embrión de lo que muy poco después sucedió en Praga y en Barcelona, entre otras grandes ciudades. Los jóvenes leían en aquel primer gran tratado global de libre comercio que se quería firmar en Seattle lo que efectivamente ocurrió: las empresas transnacionales comenzaban a reinar por sobre los Estados soberanos, dejando indefensos a los pueblos. Hubiese sido necesaria, entonces, hace quince años, una clase política a la altura de la rapiña que se estaba enfrentando, pero no la hubo. Hubo capitulación y defección. Y la Unión Europea nació infectada de ese virus que mercantilizó a los respectivos electorados, que se quedaron sin representación.
Esa generación peleó en las calles, en las universidades, en las fábricas, después de que ya en Seattle se marcara un camino: fue allí que los sindicatos y los verdes se unieron por primera vez, en defensa de un mundo con reglas de juego visibles y en defensa de un planeta sin escudo protector ante la producción a gran escala. Se perdieron, una por una, todas esas batallas. Dijeron “No en mi nombre” ante la segunda guerra del Golfo. No los escucharon. Dijeron no a los ajustes dictados desde el FMI y desde Bruselas. Tampoco. En el punto más álgido de la crisis de las hipotecas en España, en 2012, llegó a haber en Barcelona 500 desahucios diarios. Y allí fue que Ana Colau fundó la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH), que hoy tiene bases en toda España y que ha logrado frenar judicialmente miles de desalojos, con apoyos recibidos desde el Parlamento Europeo, y con una opinión pública cada día más consciente de que era un fraude la vida que obligaban a vivir a millones de personas. Era un fraude porque era mentira desde el principio hasta el final que los desahuciados –que se tiraban por la ventana o aparecían ahorcados en sus viviendas cuando llegaban los encargados de echarlos– eran los responsables de su mala suerte.
“Cuando empezó la crisis –decía Colau en una entrevista de enero de este año– fue dramático el hecho de que los propios responsables de la crisis rápidamente pusieron en marcha un discurso oficial retransmitido en los principales medios de comunicación durante las 24 horas, donde así como durante la burbuja escuchábamos que la vivienda era la mejor y la más segura de las inversiones, de pronto se decía que ya está bien, que los españoles habíamos querido vivir por encima de nuestras posibilidades y que todos querían ser propietarios. Fue la estigmatización de las víctimas de la crisis por parte de sus propios responsables, que evidentemente eran las entidades financieras y las grandes empresas inmobiliarias.” Así, en la España principalmente desahuciada por sus dos principales partidos políticos, la población sufriente era la gran culpable. Eso fue lo primero que cambió después del 15M, después de la oleada de indignación. Para crear la PAH fue necesario esperar a ese gran cambio anímico en la sociedad española. “Costó muchísimo –dice Colau–. Cuando empezó la crisis, las víctimas no se percibían a sí mismas como víctimas. En lugar de pensar en protestar frente a las entidades bancarias o el gobierno, estaban pensando en tirarse por el balcón o en irse del país.” Para la nueva alcaldesa de Barcelona, el puntapié inicial del cambio que se acerca hoy al poder político en España fue la recuperación de la autoestima por parte de los millones de perdedores de un sistema económico cruel y delirante.
No sólo es posible sino necesario hacer una costura de sentido entre cada suceso y cada fase por la que fueron pasando en los últimos años tantos pueblos, en diferentes latitudes, en diferentes circunstancias, eligiendo cada uno una salida de acuerdo con su devenir y su idiosincrasia. América latina en sus diversos proyectos políticos nacionales que confluyen en un bloque dispuesto a la asociación con China y Rusia, que antes estaba vedada por lazos imaginarios que sólo la unían en penurias provenientes del Norte. Europa que se recrea primero en Grecia, a través de un partido con una década de historia y de raíces sindicales, y ahora en España, con un partido político de apenas un año de historia, pero que ha sabido articular el asambleísmo que aquí fracasó en 2001. Hay aguas revueltas en la misma dirección en Irlanda, en Portugal, en Francia y en Italia. No hay nada misterioso en el propósito de tantos pueblos que quieren recuperar su autodeterminación, cuando el poder global de Occidente no hace más que demostrar día tras día que la vida humana le importa mucho menos que un saldo a favor en una cuenta de dinero sucio, pero bien lavado.

EL PRECANDIDATO A GOBERNADOR BONAERENSE MASSISTA RECIBIO MULTIPLES REPUDIOS POR SU AGRESION A UN PERIODISTA La política de seguridad de De Narváez

Funcionarios y dirigentes del oficialismo y la oposición criticaron a De Narváez. Remarcaron su carácter “antidemocrático y patotero” y advirtieron que los conflictos se resuelven en la Justicia y no de manera violenta por mano propia.





Dirigentes de diversos espacios políticos coincidieron en repudiar la agresión a golpes del diputado y precandidato a gobernador por el Frente Renovador Francisco de Narváez contra el director de la Agencia Nova de La Plata, Mario Casalongue, tras la publicación de una nota agraviante hacia su familia. El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, calificó de “deplorable” la agresión de De Narváez –quien dijo estar arrepentido y pidió disculpas– y se preguntó qué deberían hacer los miembros del gobierno “ante la gran cantidad de agravios, mentiras e insultos a los que fuimos sometidos durante estos años”. La diputada PRO Patricia Bullrich expresó su “repudio” y consideró que la agresión “empaña la garantía constitucional de la tolerancia”. “Al candidato @denarvaez, blanco y rico, no le gustó la opinión de un periodista, fue y lo cagó a trompadas. ¿Mirá si eso lo hubiera hecho yo?”, se preguntó Luis D’Elía por Twitter. La decana de la Facultad de Periodismo y Comunicación Social de la Universidad de La Plata, Florencia Saintout, tildó a De Narváez de “antidemocrático y patotero”, aunque señaló que “Nova es una agencia impresentable y mercenaria”.
La agresión fue el jueves. De Narváez, junto con un agente de seguridad privada, se metió en la oficina de Casalongue y “le pegó una piña en la boca que lo dejó inconsciente”, consignaron medios platenses. Nova había publicado una nota sobre la vida privada del diputado, con alusiones de índole sexual, que luego borró de su portal. “Cometí un error. No debí reaccionar como reaccioné. Siento vergüenza, me arrepiento y pido disculpas”, escribió De Narváez en Twitter. “Más allá de la mentira y la infamia que involucra a mi mujer y a mi familia, no debí reaccionar como reaccioné”, agregó en radio Mitre. “Hace un par de días comenzaron las llamadas de extorsión”, dijo, y agregó que después de hablar por teléfono con Casalongue decidió visitarlo. “Respeto al periodismo y lo reconozco, pero este señor es un extorsionador muy conocido en La Plata porque de esto hace su forma de vida y mucha gente cede, yo no. Ya me lo hizo en 2013, lo dejé pasar. Pero esta vez no fue así”, afirmó.
“¿Se imaginan si después de todas las barbaridades que se dijeron de nosotros tenemos que reaccionar? Una señora ha dicho en la televisión que el cuerpo de Néstor Kirchner no estaba en el féretro. ¿Me alcanzan a comprender lo que les digo?”, planteó Aníbal Fernández. “Ninguno de nosotros ha reaccionado más que presentando eventualmente alguna demanda judicial”, recordó, y lamentó que “no les asignan ningún valor a nuestras denuncias”.
“Repudiamos esta violenta situación que empaña la garantía constitucional de la tolerancia y el respeto como normas indispensables para una convivencia democrática y armónica”, afirmó Bullrich. Los funcionarios “tenemos obligación de garantizar esa libertad de expresión y no responder con ningún tipo de violencia”, sostuvo la diputada PRO.
La diputada kirchnerista Mara Brawer consideró que De Narváez “debe dar un paso al costado”. Su actitud “no fue un exabrupto” porque “planificó su ataque” ya que “fue hasta su oficina sólo para resolver su conflicto a los golpes”. “El periodista que escribió la nota es un provocador, pero eso no justifica la manera violenta con la que actuó” el precandidato massista, sostuvo, y se preguntó “¿qué tendrían que hacer los funcionarios y la propia Presidenta con todos los ataques que recibe de los medios de comunicación hegemónicos?”.
El secretario de Derechos Humanos bonaerense, Guido Carlotto, manifestó que “resulta inadmisible que un diputado de la Nación, con la carga de responsabilidad que ello implica, se apropie y ejecute prácticas que vulneran uno de los derechos fundamentales como la libertad de expresión; estamos en presencia de acciones que están íntimamente ligadas a una matriz mafiosa, a un accionar represivo que busca infundir temor”, dijo.
El dirigente del GEN y representante de la oposición en la Afsca, Gerardo Milman, consideró que “en una democracia los conflictos se resuelven en la Justicia y De Narváez debe saber que la justicia por mano propia es de caníbales y no de caballeros”. “La época en la que se defendía el honor en duelo es colonial”, reflexionó Milman.
El Sindicato de Prensa Bonaerense condenó la agresión y consideró que “no alcanza con pedir perdón”. De Narváez “debe ser procesado por la agresión, por el ataque a la libertad de prensa, y si a su vez existe una extorsión debe recurrir a la Justicia y no al salvajismo”, planteó.
La Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (Adepa) repudió por “absurda y preocupante” la agresión de De Narváez y sostuvo que quien “se siente agraviado por informaciones u opiniones debe recurrir a la vía judicial para reparar eventuales daños a su reputación”.

MODELO II EL DIA DE LA PATRIA PLAZA DE MAYO